Ya sea en el gimnasio o en las pistas de atletismo, es más que probable que veas a alguien luciendo algún tipo de equipo de compresión. Desde los calcetines a las mangas y vienen en cualquier color para que coincida con su equipo de entrenamiento, vienen con una reputación que promete apoyo, una mejor circulación, y una mejora general del rendimiento.
Aunque los estudios han demostrado que los equipos de compresión pueden ayudar a mejorar el gasto de energía durante el ejercicio y acelerar los esfuerzos de recuperación, la forma de utilizarlos es tanto o más importante. "No todas las compresiones son iguales", afirma Fred Hernandez, de PRO Compression. Es importante saber cuál es el tamaño adecuado del equipo y en qué momento hay que utilizarlo. Para obtener los mayores beneficios posibles, aquí tienes todo lo que necesitas saber sobre la ropa de compresión.
El flujo de beneficios
¿Por qué la gente elige llevar ropa de compresión? Las razones varían desde el apoyo muscular y articular durante una sesión de entrenamiento hasta el alivio de las agujetas. Y si alguna vez has experimentado DOMS (dolor muscular de aparición retardada), entonces sabes de primera mano lo intenso que puede ser el dolor.
El aumento de la eficiencia circulatoria por la manipulación de las arterias es lo que impulsa todos los beneficios que se ven de este desgaste de apoyo. "Lo bueno de los equipos de compresión es que cualquiera puede utilizarlos y experimentar sus beneficios", afirma Robin Hodges, fisióloga del ejercicio, LMT en 89 & Ivy Massge Therapy en Bentonville, AR. Y con el uso regular se consigue un mejor rendimiento en el gimnasio y una recuperación más rápida; incluso se reduce la cantidad de ácido láctico acumulado. La reducción de la hinchazón y el dolor, así como la mejora de la circulación, son fundamentales para ayudar a las personas a recuperarse de los esfuerzos de entrenamiento duro, de pie o sentado todo el día, lesiones y enfermedades que afectan a la parte inferior de las piernas.
El uso de compresiones durante el ejercicio aumenta el flujo sanguíneo a la extremidad específica, que alimenta los músculos durante el entrenamiento y ayuda a filtrar el ácido láctico de los músculos. Este aumento de volumen ayuda al proceso de filtración y, por lo tanto, produce una recuperación más rápida. Por no mencionar que las mangas de compresión para piernas también pueden actuar como barrera contra las abrasiones de la piel al realizar ciertos movimientos de la parte inferior del cuerpo, como el peso muerto.
No es de extrañar que los beneficios vayan más allá del gimnasio y se extiendan al mundo laboral, donde la gente está de pie todo el día. "Los calcetines y las mangas de compresión son muy populares entre la comunidad médica, incluidos enfermeros, médicos, terapeutas y técnicos que a menudo trabajan turnos de 12 a 14 horas o más", afirma Hernández. La mayor sujeción de los calcetines de compresión ayuda a reducir la hinchazón de piernas y pies, favorece el mantenimiento de las articulaciones y ayuda a combatir las varices.
El ajuste perfecto: cómo medir las mangas
A la hora de elegir el equipo de compresión, la talla es importante. Según Hodges, las mangas de compresión deben ser ajustadas pero elásticas. "No es necesario que aprieten demasiado, ya que podrían cortar el flujo sanguíneo", afirma. Lo importante es sentir sujeción, pero también poder realizar una amplia gama de movimientos durante el ejercicio.
La mayoría de las marcas de compresión incluyen una tabla de tallas recomendadas, ya sea en su sitio web o en su embalaje. A la hora de elegir la talla correcta de un equipo de compresión, basta con medir la parte del cuerpo que se desea sujetar y seleccionar la talla recomendada para el manguito.
Por ejemplo, para una manga para el brazo, tendrá que medir su bíceps, y para un calcetín de compresión, tendrá que medir la parte más ancha de su pantorrilla y su número de calzado. Recuerda esta sencilla regla: Si no puedes moverte cómodamente con ellos, no son los adecuados y puede que tengas que aumentar la talla. Cuando tengas la compresión que mejor se adapta a ti, prepárate para disfrutar de todas sus ventajas.
Cuándo comprimir
El momento lo es todo. Para obtener los mejores resultados de rendimiento, Hernández sugiere que los momentos más óptimos para usar ropa de compresión son tanto durante el entrenamiento como en la recuperación post-entrenamiento.
Durante el entrenamiento, el equipo de compresión lleva sangre rica en oxígeno a los músculos, que se llenan de nutrientes e hidratación. También reduce las vibraciones, lo que puede mejorar la eficacia y la mecánica muscular. En el periodo de recuperación, la compresión constante ayuda a reducir la inflamación y la hinchazón, así como a eliminar el ácido láctico, lo que favorece una curación más rápida (y menos dolorosa).
El uso de compresión durante estos dos momentos importantes se complementará y aportará muchos beneficios.
Pruébelo: Compresión graduada
Una vez tomadas las medidas, el siguiente paso es asegurarse de que el material sea de alta calidad. "Al elegir la manga de compresión, es importante que sea de buena calidad y no de un material barato", dice Hodge. Al fin y al cabo, estás invirtiendo en tu cuerpo y necesitas la mejor calidad posible. Aquí es donde la compresión graduada destaca sobre el resto.
¿En qué consiste? Los equipos de compresión graduada ejercen presión en los puntos adecuados para aumentar el flujo sanguíneo y ayudar a reparar los tejidos blandos dañados. PRO Compression explica: "Cuanto más te alejas del corazón, más compresión sientes, lo que favorece una circulación óptima". "El objetivo es mejorar la circulación de la sangre hacia el corazón cuando estás en posición vertical corriendo o sentado en una reunión de negocios.
Por lo tanto, si está buscando un nuevo manguito de compresión o quiere probar uno por primera vez, recuerde: El tamaño, la calidad y el momento adecuado harán que su experiencia de uso de compresión sea lo más eficaz posible.